Introducción
La enfermedad de Fabry es un trastorno hereditario del catabolismo de los glicoesfingolípidos
producido por el déficit del enzima lisosomal α-galactosidasa A (α-GAL A), que origina el
depósito intracelular, especialmente globotriaosilceramida (Gb-3), en el endotelio vascular y
otros tejidos. Se transmite ligada al cromosoma X.Tradicionalmente se ha considerado de
transmisión recesiva, que las mujeres heterocigotas son portadoras, y que sólo un 1%
desarrollaría la enfermedad debido a la inactivación al azar de uno de los cromosomas X
(conocido como efecto Lyon), sin embargo, hay una evidencia creciente que un gran porcentaje
de mujeres heterocigotas tiene déficits enzimáticos parciales y manisfestaciones clínicas con
expresividad variable.
Es una enfermedad progresiva que causa manifestaciones derivadas de la disfunción del
órgano afectado por los depósitos, principalmente riñón, corazón, sistema nervioso, tracto
gastrointestinal, y piel, aunque puede participar cualquier órgano y sistema. Estudios clínicos y
experimentales han puesto de manifiesto que la enfermedad de Fabry condiciona un estado
inflamatorio vascular y protrombótico. De hecho, los eventos cardiovasculares, pricipalmente
cardiopatía isquémica y accidentes cerebrovasculares son una causa importante de morbi-
mortalidad en estos pacientes.
Recomendaciones trazadoras
1. Investigar las posibles relaciones genotipo-fenotipo para determinar cuándo ini-ciar un tratamiento específico en función de la gravedad de la mutación GLA.
2. Seguimiento mediante marcador pronostico Gb3.
3. Evaluar terapia combinada: reducción de la síntesis de sustrato combinada con ERT o con acompañante farmacológico.