Infección tejidos blandos

Introducción

Las infecciones de piel y tejidos blandos (IPTB) representan la tercera causa de consulta por enfermedades infecciosas a los servicios médicos, después de las infecciones respiratorias y urinarias. Estos tres grupos conforman cerca del 71,88% de visitas al servicio de urgencias en los Estados Unidos entre el 2006 y 2010. En Colombia, se ha reportado que el 2,7% de los pacientes consultan a un primer nivel por una de estas causas durante el año 2014. Se ha evidenciado un aumento en la incidencia de la infección de piel y tejidos blandos hasta en un 50%, lo anterior asociado al envejecimiento de la población, aumento del número de comorbilidades, inmunosupresión y uso indiscriminado de antibiótico. 

La infección de piel y tejidos blandos, son infecciones que afectan cualquier capa de la piel, fascia o músculo; siendo el agente etiológico principal el Staphylococcus aureus. Bacteria que reporta una resistencia hasta del 36% en Norteamérica, Latinoamérica y Europa. El S. aureus meticilino resistente adquirido en la comunidad (SAMR-AC) tiene una prevalencia global en Colombia del 45 al 51% en infecciones invasivas en pacientes de hospitales de cuarto nivel. Se calcula que de 16 a 34,1% de los pacientes con IPTB reciben un tratamiento inicial inapropiado; lo que se correlaciona con un incremento en la estancia hospitalaria, aumento de costos y mayor riesgo de mortalidad.

Recomendaciones trazadoras

1. Se recomienda utilizar ecografía de piel y tejidos blandos como una herramienta para diagnosticar abscesos cuando existan dudas del diagnóstico después de la valoración clínica.

2. Para pacientes con IPTB purulenta asociada a signos de respuesta inflamatoria sistémica, inmunosupresión, absceso de más de 5 cm, absceso con celulitis extensa, o recurrente al manejo con incisión y drenaje, se recomienda el inicio de antibiótico oral contra SAMR en adición a la incisión y drenaje.
3. Se recomienda dar egreso para continuar con manejo ambulatorio oral en un paciente con IPTB cuyas comorbilidades se encuentren controladas, tenga un manejo antimicrobiano definido, una evolución clínica favorable, tolere la vía oral y se garantice el suministro del medicamento.

¿Te ha resultado útil este artículo? No

¿Cómo podemos ayudarte?